Hi ha arbres de tants tipus que necessitem tot un gran llibre de botànica per a classificar-los, però en ells sols trobarem la seua descripció física, no el seu interior, els seus somnis, perquè en la seua saba corre la poesia i això els transforma.
La vocación de los árboles
Algunos árboles
cuando se cansan de estar quietos
piden que los conviertan en curiaras,
si tienen vocación de navegantes, claro:
árboles de acantilado,
de ribera
de playa.
Hay árboles que buscan la libertad del viento
-esos tuvieron por confidente a un pájaro-
puentes colgantes
retadores del tiempo,
argonautas
de los barrancos
Hay árboles que quieren
ser árboles tan sólo.
Sentir los pies de un niño
subiendo entre sus ramas,
entretejer un nido en su follaje,
regalar frutos,
florecer,
dar abrigo.
Y al pasar de los años,
o de los siglos,
descansar finalmente
sobre la Tierra Madre
y soñar que mañana
renacerán, otra vez
árboles.
La il·lustració és de Vladimir Kush.
:) gràcies per compartir. Un abrazo desde Venezuela ¡Feliz Navidad!
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