Huida a Egipto
(Joseph Brodsky)
... no se sabe de dónde surgió el guía.
En el desierto, elegido del cielo para el milagro
por su semejanza, pasaron la noche
y alumbraron la hoguera. En la cueva
que cubría la nieve, sin presentir su destino,
dormía el niño en la aureola dorada
de sus cabellos que, en un instante,
se acostumbraron a irradiar su luz-
no sólo entonces y en aquel lugar de tez oscura
sino, en verdad, por todo el mundo, como la estrella,
mientras exista la tierra: por doquier.
M'has recordat un passeig pel cementiri-illa de Sant Michele, a Venecia... allà vaig veure, sota la neu, la tomba de'n Brodsky (i la d'Stravinsky, i d'altres...). Amb llum, sota el cel d'un matí d'hivern. I després, al vaporetto, jo anava llegint "Marca de agua". Gràcies.
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